El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto que ordena la suspensión de la entrada de migrantes al país a través de la frontera sur con México, informó la Casa Blanca.
La medida forma parte de las acciones implementadas por el mandatario contra la migración ilegal en Estados Unidos.
La orden ejecutiva permite repatriar y remover a los migrantes que ingresen a Estados Unidos a través de la frontera con México.
Este mismo miércoles, la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley para detener a migrantes.
“Mediante el ejercicio de su autoridad, el presidente Trump ha restringido aún más el acceso a las disposiciones de las leyes de inmigración que permitirían a cualquier extranjero ilegal involucrado en una invasión a través de la frontera sur de los Estados Unidos permanecer en el país, como el asilo”, se lee en la orden ejecutiva.
Justifica la orden ejecutiva con la solicitud de protección de Texas contra “invasiones durante la administración Biden, pero este no los protegió de millones de migrantes ilegales que ingresan a Estados Unidos”.
“Invaden sus comunidades e imponen miles de millones de dólares en costos a los gobiernos estatales y locales”, señala.
El documento autoriza y ordena al Departamento de Seguridad Nacional, al Departamento de Justicia y al Departamento de Estado a tomar todas las medidas necesarias para repeler, repatriar y expulsar de inmediato a los extranjeros ilegales a través de la frontera sur de Estados Unidos.
Los estados acordaron renunciar a gran parte de su soberanía a cambio de la promesa del Gobierno federal, contenida en el Artículo IV de la Constitución de Estados Unidos, de “proteger a cada uno (de los estados) contra la invasión”, detalló la Casa Blanca en un comunicado.
De acuerdo con lo establecido, Donald Trump cuenta con la autoridad, bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad, para impedir el ingreso de migrantes ilegales al país a través de la frontera sur con México.
Las autoridades han restringido el acceso a las disposiciones de las leyes de inmigración que permitían a cualquier persona permanecer en Estados Unidos luego de cruzar los cercos fronterizos.
Asimismo, mediante el ejercicio de su autoridad, el mandatario republicano autorizó al Departamento de Justicia, al Departamento de Seguridad Nacional y al Departamento de Estado tomar las medidas necesarias para repeler, repatriar y expulsar de inmediato a los migrantes ilegales a través de la frontera sur del país con México.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos amenazó a las autoridades locales y estatales con llevarlas a juicio si no cooperan con las políticas migratorias del mandatario, de acuerdo con AFP.
“La ley federal prohíbe a los actores estatales y locales resistirse, obstruir e incumplir de cualquier modo las órdenes legales relacionadas con la inmigración”, detalló el fiscal general interino Emil Bove.
Trump autoriza arrestos en iglesias y colegios
En cuanto a las medidas contra la migración ilegal, el presidente de Estados Unidos autorizó a las fuerzas del orden federales arrestar a migrantes ilegales y llevar a cabo operaciones policiales en lugares considerados sensibles, como iglesias, hospitales o colegios.
“Los delincuentes ya no podrán esconderse en escuelas, colegios o iglesias de Estados Unidos para evitar ser arrestados. La administración de Trump no limitará a nuestras valientes fuerzas del orden”, informó el secretario interino de Seguridad Nacional, Benjamin Huffman.
Según Europa Press, el objetivo es “atrapar a criminales extranjeros”, incluyendo asesinos y violadores, que hayan ingresado de manera ilegal a Estados Unidos.
