El 8 de noviembre se abrirá la frontera entre México y Estados Unidos por vía terrestre para viajes no esenciales, para ellos y para quienes ingresen por vía aérea cambiarán las políticas, en seguimiento a las recomendaciones de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, CDC, para evitar contagios de Covid-19.
Con la apertura de la frontera las familias y los amigos podrán reunirse de nuevo, los turistas podrán visitar sitios emblemáticos y parques nacionales y, de esta manera se reactivará la economía.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos informó que quienes ingresen al país, y tengan más de 18 años, deberán tener completo el esquema de vacunación contra el Covid-19 y comprobarlo con una constancia oficial.
El documento además deberá contar con la información básica del pasajero que permita establecer que si cuenta con su esquema completo de vacunación contra el covid-19 como nombre y fecha de nacimiento, tipo de vacuna recibida, número de dosis aplicadas, y fechas y lugar en las que fue inmunizado.
Cabe recordar que, de momento, las autoridades norteamericanas solo permitirán el acceso a quienes cuenten con vacunas aprobadas por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos), y que se encuentren en la lista de la Organización Mundial de la Salud, OMS.
Estos biológicos son de las marcas Moderna, Pfizer-BioNTech, Janssen (Johnson & Johnson), Oxford/AstraZeneca, Sinopharm, Sinovac.
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El Departamento de Estado norteamericano excluye de este requisito a los menores de 18 años, así como también a las personas que por motivos médicos tengan contraindicado el biológico y los extranjeros que necesiten viajar por razones humanitarias o de emergencia (con una carta emitida por el gobierno de EEUU que confirme la necesidad urgente de viajar) y las personas que viajen con visas no turísticas desde países con baja disponibilidad de vacunas.
Quienes vayan a permanecer en territorio norteamericano por más de 60 días, deberán inmunizarse contra el Covid-19 en dicho país y todos los extranjeros deberán respetar las medidas básicas para protegerse del virus.
Pruebas de detección serán más rigurosas
Las autoridades norteamericanas indicaron que a partir del 8 de noviembre serán más rigurosas las pruebas de Covid-19: los ciudadanos no vacunados, residentes legales permanentes y los viajeros “deberán proporcionar una prueba negativa tomada dentro de un día de viaje”.
Así mismo, todos los ciudadanos extranjeros deberán presentar una prueba de covid-19 con resultado negativo, tomada tres días antes de su viaje a los Estados Unidos. Los niños entre los 2 y 17 años de edad también tendrán que realizarse una prueba antes de viajar.
Fuente infobae.com