La presidenta Claudia Sheinbaum descartó que el llamado Plan México sea para enfrentar al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La mandataria respondió al planteamiento de que Claudio X. González Laporte, presidente del consejo de Kimberly-Clark de México, había dicho en una entrevista que dicho plan era la clave para renegociar el T-MEC y al presidente Trump.
Sheinbaum sostuvo que no se trata de un plan coyuntural, sino de un plan de acción de largo plazo, incluso, transexenal.
La mandataria afirmó que ese plan “tiene como objetivo no solo el crecimiento económico, porque el PIB a veces no refleja el bienestar, o los salarios de las y los trabajadores, sino que tiene como objetivo el desarrollo equitativo y sustentable del país.
Entonces, agregó, “que se fomente la producción de México. ¿De qué sectores? Muchos donde importamos. Decían: bueno es que están planeando que van a dejar de importar productos de China porque ahora es la coyuntura de Estados Unidos y la competencia con China.
“No, no es por eso. Claro que nosotros queremos que se fortalezca el tratado comercial que tenemos con Estados Unidos y Canadá, porque fortalece a las tres naciones. Incluso planteamos que debe abrirse al resto de América”.
Dejar de importar tiene que ver con la fortaleza mexicana”, como cosas que se fabricaban en México y que se fue cerrando, como la industria textil, y ahora se busca recuperar, así como con la innovación impulsado por el desarrollo de la ciencia y la tecnología.
Sheinbaum Pardo recordó que Claudio X. González Laporte estuvo en la reunión del Consejo Mexicano de Negocios a la que fue invitada siendo ya presidenta constitucional y ahí “les platiqué hacia donde iba el Plan México. Es una propuesta integral que tiene como base el bienestar del pueblo de México y la nación”.
La presidenta reiteró que tener diferencias con unas y otras personas es democracia y “hay libertad de expresión. Habrá cosas en las que no estemos de acuerdo y cosas en las que sí”.
