Cerca de medio centenar de personas, entre familiares y amigos de Sergio Armando “N”, como mandata la ley que se le nombre, en tanto se esclarece su situación legal, se manifestaron la tarde de este martes frente a Palacio Municipal de Cajeme para exigir la liberación del joven que aseguran es inocente del delito que se le imputa: el homicidio del ex procurador de Justicia en Sonora, Abel Murrieta Gutiérrez.
Quienes lo defienden, afirman tener pruebas de su inocencia, pues no solo tiene un historial limpio, sino que en las fechas en que ocurrió el homicidio del entonces candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Cajeme, el joven estaba lesionado de una rodilla.
Julio César Meléndrez Corona, amigo desde hace casi 12 años de Sergio Armando, asegura que no hay forma de que éste haya cometido un delito como el que se está imputando y ni siquiera el caso por el que lo detuvieron el pasado viernes 18 de agosto, que fue supuestamente estar en posesión de una bicicleta con reporte de robo. Ya detenido cambiaron los cargos y le señalaron como presunto autor material del homicidio de Abel Murrieta.
A decir de Julio César, Sergio Armando tiene 24 años y es estudiante de la Licenciatura en Educación Física en el ITSON “de la Náinari”; lo conoce desde la Secundaria y por ello puede dar testimonio de que es un joven de bien, que nunca ha tenido problemas con la justicia.
“Él es estudiante, es deportista, tranquilo, es más, acababa de comprarse una guitarra para aprender a tocar, él no tiene necesidad de andar en esas cosas, nunca ha tenido necesidad de andar en eso que dicen”, asegura Julio, quien se resiste a mencionar siquiera el delito de homicidio por el que ya fue vinculado a proceso Sergio.
“Yo pienso que es una confusión o nomás quisieron agarrar a alguien y lo hicieron de mala manera, porque cuando lo detuvieron, fue el viernes 18 como a las 6:00 de la tarde y dijeron que supuestamente la bicicleta que traía era robada; cuando todos supimos que lo habían detenido nos movimos a buscarlo en todas las comandancias y en las agencias (del MP) y nada, no lo encontramos y resultó que a la media noche ya estaba en Hermosillo, se lo llevaron rápido, sin permitirle una llamada, sin avisar a su familia, a nadie, sin dejarlo buscar abogado”, narra.
Señala que se le mantuvo incomunicado casi dos días, ya que fue hasta el domingo 20 de agosto que le permitieron comunicarse con su familia, pero hasta ayer no les permitían verlo ni presentar sus pruebas.
“Ya tuvo dos audiencias y sin abogado particular, solo le pusieron uno de oficio que no hizo nada”, agrega.
¿Qué estaba haciendo Sergio Armando hace dos años?, se le preguntó a Julio César
“Mire, pues la verdad, hace dos años, en abril de 2021 él se lastimó la rodilla, yo no soy doctor ni nada, pero sé que se lesionó feo, primero haciendo ejercicio de cayó de unas barras, no se aliviaba cuando se volvió a lastimar, correteando un camión… fue al Seguro y le sacaron líquido de la rodilla porque la traía muy hinchada y de ahí le pusieron muletas, porque no lo podían operar porque todavía estaba lo de la pandemia”.
¿Y en mayo, sabes dónde estaba el 13 de mayo?- se le inquirió
“Pues lo más seguro es que estuviera en su casa, porque todo el tiempo que anduvo con muletas casi no salía, le daba miedo lastimarse otra vez, porque después de que se lastimó la primera vez, se volvió a lastimar y le pusieron las muletas y hay reporte médico de que en esas fechas estaba lastimado”.
¿Tu amigo tiene apodos, como El Checo o El Payaso, como lo señaló la Fiscalía?
“Pues Checo, pudiera ser, por Sergio, pero no es que todos le digan así, pero eso de El Payaso, para nada, no, nunca, nada que ver”, responde.
Julio César afirma que ni la familia ni sus amigos van a dejar de exigir que Sergio sea liberado, porque lo que le está sucediendo solo puede ser confusión o tomarlo como “chivo expiatorio”, y las principales razones para desconfiar de la actuación de la autoridad, son las irregularidades en el caso, como detenerlo con imputaciones falsas, mantenerlo incomunicado y no permitirle un abogado de su confianza.