Por Moisés Gómez Reyna
Pobreza infantil extrema
¿Se imagina usted tener que sobrevivir con menos de 37 pesos diarios?, es decir, tener que comer, vestirse, aprender, curarse o moverse, solamente con ese ingreso al día.
Pues esa es la dura realidad que enfrentan un total de 333 millones de menores de 18 años en el mundo (1 de cada 6 niños), esto según un nuevo estudio realizado en conjunto por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y el Banco Mundial.
Y es que pese a representar sólo un tercio de la población mundial, las niñas y niños componen más de la mitad de la población en situación de pobreza extrema a nivel internacional. Por lo tanto, estos menores carecen de alimentación, vivienda, atención médica y educación, todas necesidades esenciales para un sano desarrollo y crecimiento de la niñez.
En el caso de México al 2022, detalla el documento, el 4.5% de los niños (1.7 millones de menores) viven en pobreza extrema con menos de 2.15 dólares (37 pesos) al día, mientras que el 13.6% (5.2 millones de menores) sobrevive con menos de 3.65 dólares (62 pesos) diarios.
El informe enfatiza a los líderes mundiales que de mantenerse el ritmo actual, no se cumplirá con el Objetivo de Desarrollo Sostenible de poner fin para 2030 a la pobreza infantil extrema. La Agenda 2030 para el desarrollo sostenible se adoptó por varios países, incluyendo México, en 2015 y, a medio camino de finalizar, aún se está muy lejos de alcanzar varias de sus metas.
La UNICEF afirmó que los avances logrados hasta el momento han demostrado que, con las inversiones y la voluntad adecuadas, se puede sacar a millones de niños de lo que a menudo es un círculo vicioso de pobreza.
No obstante esos avances, las crisis derivadas de los impactos de la pandemia de COVID-19, los conflictos bélicos, el cambio climático y las crisis económicas, han estancado el progreso en los últimos años.
El análisis de UNICEF y el Banco Mundial destaca que si bien el número de niños que viven con menos de 2.15 dólares (37 pesos) al día disminuyó de 383 millones a 333 millones, un 13%, entre 2013 y 2022, el impacto económico de la pandemia provocó que 30 millones de menores de edad no dejaran la pobreza infantil extrema en los últimos 3 años.
Las niñas y los niños, alerta, tienen más del doble de probabilidades que los adultos de vivir en hogares en precariedad, sin los alimentos, la vivienda, la atención médica y la educación que requieren para aspirar a un futuro mejor.
El informe señala que los niños más vulnerables, son particularmente los de las zonas rurales y los que viven en hogares donde el jefe de familia tiene poca o ninguna educación.
El Banco Mundial y UNICEF delinearon varias medidas urgentes para erradicar la pobreza infantil extrema, y entre ellas que destacan:
1. Asegurar que los esfuerzos se enfoquen continuamente en los niños que viven en pobreza extrema y en contextos frágiles o inestables.
2. Dar prioridad a las agendas destinadas a abordar la pobreza infantil, incluida la ampliación de la cobertura de protección social para los niños, con el fin de que llegue a los que viven en hogares extremadamente pobres.
3. Diseñar políticas públicas para llegar a los hogares numerosos, con niños pequeños, y a los de zonas rurales.
4. Elevar el acceso a prestaciones infantiles universales para bajar la pobreza.
5. Diseñar programas de protección social inclusivos, teniendo en cuenta la discapacidad y las necesidades específicas de género.
La consigna es sencilla: a los niños no les podemos fallar. Por ello, es indispensable redoblar esfuerzos para erradicar la pobreza infantil extrema y garantizar que todos las niñas y niños tengan acceso a servicios esenciales, incluida la educación, la nutrición, la atención sanitaria y la protección social.
Twitter: @gomezreyna