Apenas estamos en los primeros días de enero de 2024 y los anuncios de aumentos o “ajustes” a diversos impuestos y derechos federales o estatales, están complicando el inicio de año para los bolsillos de miles de familias.
En otras palabras, la llamada “cuesta de enero” se está empinando más de lo que debería.
Lo peor es que han sido los gobiernos quienes han dado el banderazo de arranque a los aumentos este 2024, siendo que la autoridad debería ser la primera en ajustarse el cinturón para tratar de no dañar o afectar la economía de los hogares en México y Sonora, muy castigada de 2021 a 2023 por la alta inflación.
El que inició la cascada de aumentos a finales de diciembre fue el Gobierno federal, esto al dar a conocer los incrementos de 4.3% a las cuotas del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para 2024.
Aunque lo niegue el oficialismo, iniciaron el año con un “gasolinazo”, ya que en el caso de la gasolina magna o regular la cuota de IEPS se elevó de 5.91 a 6.17 pesos por litro, mientras que en la premium subió de 4.99 a 5.21 pesos por litro y en el diesel se incrementó de 6.50 a 6.78 pesos por litro.
Vale la pena señalar que desde diciembre las gasolinas y el diesel no cuentan con estímulos que disminuyan el cobro de la cuota de IEPS, por lo que en este momento el Gobierno recauda integro el recurso derivado de este impuesto.
Cualquier impuesto al consumo como el IVA o el IEPS es trasladado como costo al consumidor final, por lo que esta alza tarde o temprano será cargada a los mexicanos que compren combustibles.
Además, el incremento del IEPS al diesel elevará los costos de transporte de mercancías y pasajeros, por lo que seguramente tarde o temprano esto repercutirá en el costo de pasajes y diversos productos alimenticios.
En el Senado de la República la oposición ha presentado en múltiples ocasiones iniciativas para eliminar el cobro del IEPS a las gasolinas, lo que podría traducirse en una reducción de su precio hasta por 6 pesos, sin embargo, Morena y sus aliados han rechazado todas las propuestas en este sentido.
Adicionalmente, el Gobierno federal elevó de 0.59 a 0.61 pesos la cuota de IEPS por cigarrillo y de 1.50 a 1.57 pesos por litro la cuota a bebidas saborizadas (refrescos).
Luego, la Secretaría de Hacienda y Comisión Federal de Electricidad (CFE) dieron a conocer un ajuste de 4.3% a las tarifas eléctricas para este 2024.
Vale la pena recordar que, en Sonora, además de los usuarios domésticos, los usuarios comerciales son de los más afectados por los altos cobros de la luz, que generalmente tienen que trasladarlos a los precios de las mercancías.
En el caso de Sonora, este 2024 la revalidación y el alta de placas tuvo un incremento del 8%, es decir, el doble de la inflación esperada para este año, por lo que este será otro duro golpe para las personas que posean vehículos, quienes además deberán cargar con el alza a los combustibles por el IEPS.
La única buena noticia la dio el Ayuntamiento de Hermosillo que anunció que este año no aumentó el cobro del Impuesto Predial, precisamente con la idea de favorecer el bolsillo de las familias de la capital del Estado.
Como vemos, la cuesta de enero pinta difícil este 2024. Lo único que se puede hacer en el corto plazo para enfrentar estos aumentos es tratar de optimizar nuestro gasto y buscar las formas de reducir nuestro consumo de electricidad y combustibles.
Luego, en junio, lo que hay que hacer es darle nuestro voto a quien sí se comprometa a proteger la economía familiar y, por el contrario, retirárselo a quienes prometieron bajar la luz y la gasolina cuando llegaran al Gobierno y que como vemos no lo cumplieron.
Twitter: @gomezreyna