El dirigente estatal de MORENA, Heriberto Aguilar no pensó que su espontánea declaración tendría pronta respuesta.
Dijo que en su partido aceptaban a todos aquellos que quisieran sumarse al movimiento de transformación, pero que no aceptan Beltrones.
Más tardó en decirlo que el propio ex gobernador Beltrones en responderle de forma puntual e inusual, porque el político no suele subirse al ring tan fácilmente, siempre escoge sus batallas.
Lo sintomático fue lo que sucedió después de lo dicho por Heriberto y la respuesta del exmandatario… ¡SILENCIO TOTAL!
Nadie salió a defender al dirigente morenista, no se desató la acostumbrada carnicería en redes sociales contra Manlio Fabio.
Como cuando mataron a Pedro Navaja:
Y créanme gente, que aunque hubo ruido nadie salió.
No hubo curiosos, no hubo preguntas, nadie lloró
En fin, que Heriberto seguramente lo dijo al calor de la conferencia que ofrecía en el cargo que recién le acaban de dar.
Lo que no se esperaba era la respuesta y menos el ensordecedor silencio de las redes.
Y es que Beltrones no le estaba respondiendo a Heriberto…y el que entendió, entendió.
Nomás queda confiar
Aquí mismo se lo comentamos hace días, es necesario saber cuáles serían las consecuencias de la ideológica decisión del gobierno federal de cancelar la concesión de una mina de litio en Sonora.
El asunto no es menor si tratamos de leerlo correctamente y lo entendemos, porque así es, una pésima señal para otras empresas que tengan puesta la mira y la chequera en Sonora.
Las razones esgrimidas por el gobierno de la 4T son débiles y confusas, cuando dice que las empresas no cumplieron con el mínimo de inversión comprometida en lo que tienen trabajando en esos yacimientos.
O ya tienen a quien darle esas concesiones o de plano esos trabajos de exploración, en los que ya había invertidos millones de dólares se van a quedar tirados.
Esa basta zona llena del famoso mineral del futuro se quedará abandonada, retrasando el progreso que prometían y siendo una señal que podría ahuyentar algunas inversiones.
Porque está claro que el gobierno no tiene ni el dinero, ni la experiencia ni la tecnología para hacerse cargo de eso.
No en balde el gobernador Alfonso Durazo fue medido en su respuesta cuando le preguntaron sobre el tema y dijo que él confía en que no haya afectaciones tras la cancelación anunciada por el presidente López Obrador.
Y es que no podemos ignorar que en Sonora hay esfuerzos por atraer inversiones, aunque no sabemos aún que tanto se afectan tras este tipo de decisiones.
La Tijera es un texto confeccionado con recortes que aporta el staff de colaboradores de sergiovalle.mx
Cuidado con aquel que ande descosido.