Las autoridades del metro de Nueva York prohibieron la entrada de perros a menos que éstos cupieran en una bolsa o un transportín.
La medida se dictó hace algunos meses, pero desde entonces los usuarios se las han ingeniado para poder transportar a sus mascotas.
Se ha visto a los habitantes con distintos bolsos, incluso algunas que no son adecuadas a su tamaño.
Estas imágenes han causado revuelo en redes sociales, pues aseguran que un dueño es capaz de hacer lo que sea para llevar a su mejor amigo con él.