Avances tecnológicos como la inteligencia artificial y la automatización de fábricas, transformarán el empleo de manera radical en los próximos años, y estar al tanto de las tendencias que vienen en el mundo laboral es indispensable para trabajadores, empleadores y gobernantes.
De acuerdo con el Reporte del Futuro del Empleo 2023, elaborado por el Foro Económico Mundial (WEF), y que en México contó con la colaboración del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), para el año 2027 uno de cada cinco empleos en el mundo experimentará cambios vigorosos, como resultado de la destrucción de puestos de trabajo en industrias específicas y la creación de nuevas plazas en sectores emergentes.
El estudio tuvo como propósito, precisamente, preparar e informar a trabajadores, empresas y gobiernos de los obstáculos y oportunidades que se avecinan en el empleo, de tal forma que sea una guía para la toma de decisiones que garanticen trabajos más competitivos y mejor remunerados.
Para asegurar un crecimiento neto del empleo en un contexto de creciente digitalización, advierte el documento, es fundamental garantizar la transición ecológica y la adopción de la tecnología, así como considerar la localización de las cadenas de suministro.
Señala que es importante tomar en cuenta que la incertidumbre económica, geopolítica y de salud de los últimos años ha agravado las desigualdades en las condiciones laborales entre las economías emergentes y desarrolladas, así como las de sus trabajadores.
Por otra parte, el informe recalca que en los próximos años las tendencias de creación y destrucción de trabajos se verán principalmente influidas por los cambios económicos, ambientales y tecnológicos.
De esta manera, habrá una transición hacia empleos que involucren temas de sustentabilidad ambiental, nuevos estándares sociales, gobernanza y localización de las cadenas de suministro, precisa.
Por lo anterior, el WEF prevé que los puestos que tendrán mayor crecimiento son: Operadores de equipos agrícolas, profesores de educación vocacional y conductores de camiones pesados y autobuses, mientras que los empleos con tendencia a desaparecer son los puestos administrativos y de roles tradicionales de seguridad, fábricas y comercios.
Las principales habilidades que serán consideradas necesarias en el mundo laboral son las cognitivas, es decir, las relacionadas con el pensamiento analítico y creativo, así como las de autoeficacia que tiene que ver con motivación, flexibilidad, resiliencia y curiosidad.
Según el reporte, estos nuevos requerimientos son el reflejo de la creciente necesidad de adaptación de las empresas y de los trabajadores a condiciones inestables del mercado laboral.
En especial, las industrias que demandan a más trabajadores con habilidades cognitivas son las electrónicas, las organizaciones no gubernamentales y empresas en el giro de los materiales químicos. Mientras que las industrias que requieren las habilidades de autoeficacia son las de petróleo y gas, de atención y servicios personales y electrónicas.
Para México, el estudio concluye que para lograr una transformación de la industria se deben desarrollar e impulsar trabajos que respondan a los avances tecnológicos y automatización del mercado laboral actual.
Algunos de los perfiles que podrían ser demandados son los especialistas en inteligencia artificial, los desarrolladores de aplicaciones y los analistas de inteligencia de negocios.
Para incrementar el talento en las empresas y generar empleos, el documento sugiere realizar prácticas como ofrecer mayores salarios, apoyar la salud de los empleados y ofrecer modalidades de trabajo remoto o híbrido.
No adaptarnos a estas tendencias, puede dejarnos como trabajadores, empleadores e incluso como país, fuera de la jugada en la economía del siglo 21.