La firma INGETEC, especialistas en servicios de consultoría y asesoría para la Industria de la Construcción presentó un informe que vale la pena comentar.
Dicha firma la representa un grupo profesional que interviene en varios frentes relacionados con esta industria entre los que destacan los de la energía, petróleo y gas, así como los temas arquitectónicos y de urbanismo.
Este reciente informe se liga sobre todo a las tendencias constructivas de 2023 que han venido cambiando desde el 2020 con la pandemia de Covid-19 en aspectos como la nueva tecnología y los materiales o bien la práctica y gestión de los tiempos de obra.
Eliminar faltantes y desperdicios en materiales de madera, concreto, aluminio, acero, plástico, hormigón son altamente representativos en la matriz de insumo-producto de los constructores no se diga la facilidad en manejo e instalaciones.
Una segunda tendencia muy ligada a la anterior lo es la capacitación de la mano de obra requerida para trabajar con elementos prefabricados lo que conlleva mejores salarios, mayor productividad y mejora continua.
La tercera tendencia que se menciona en el informe es el tema de la digitalización, el famoso big data, la nube que no solo abren nuevas áreas de oportunidad, sino que ayudan a planificar los diseños y proyectos, no se diga la eliminación de los errores.
Otras tendencias tienen que ver con los tiempos y movimientos mediante la producción estandarizada y de soluciones integrales al hablarse de la producción 3D, dispositivos inteligentes y hasta robots en la construcción modular.
No obstante, estos beneficios hay que tener en cuenta el fuerte incremento de precios en materiales estratégicos como el cemento, la varilla, el vidrio, tabique, madera sin olvidarnos del dinero caro entre muchos otros.
Los especialistas y las empresas saben que el horno no está para bollos ni la novia para tafetanes, este y el año que viene con el ciclo sexenal con el que se frena todo.
Nomás, para normar criterio, el índice de precios al productor en este segmento ha tenido inflación mayor a dos dígitos en los años anteriores y apenas este año comienza a aminorar a un solo digito.
Así como las tendencias mencionadas hay otras, empero, deseo destacar que la construcción aún con estas innovaciones, después de la pandemia no ha crecido, pero si sufrido de alzas de precios colosales.
No hay bonanza para la construcción sino todo lo contrario, hay riesgos, apuros y varios retos por delante.
tal vez crezca 1% este año, sin embargo, hay que seguirla impulsando a como dé lugar tanto con obra civil como publica y no dejarla al garete o imponerle más presiones y tramitología, esperamos que así sea.
He dixi