La comunidad científica y académica de Sonora está de luto tras el fallecimiento de la doctora Gloria Elena León Paz, reconocida mundialmente por su pionero descubrimiento y patente de la fotografía del ADN humano.
La destacada investigadora dejó de existir el pasado miércoles 9 de abril, según confirmaron fuentes cercanas a su familia y la Universidad de Sonora (Unison), institución con la que mantuvo un vínculo profundo a lo largo de su carrera.
León Paz marcó un hito en la ciencia en 1991, cuando logró visualizar y registrar por primera vez una imagen directa del ADN humano, un avance que revolucionó la genética y le valió el reconocimiento internacional.
Su trabajo, desarrollado tras años de investigación en colaboración con instituciones mexicanas y extranjeras, no solo patentó esta técnica, sino que abrió nuevas puertas al estudio molecular, consolidándola como un orgullo sonorense de trascendencia global.
La Universidad de Sonora, a través de un comunicado oficial, lamentó su partida y destacó su legado:
“Fue compañera de vida del artista plástico Enrique Rodríguez, maestro jubilado de esta casa de estudios”.

Asimismo, el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) expresó su solidaridad con Ana Cristina Rodríguez León, hija de la científica, subrayando el impacto de Gloria Elena como “una gran hermosillense, investigadora y científica que le mostró el ADN al mundo”, según palabras de usuarios en redes sociales que reflejan el sentir colectivo.

Aunque no se han revelado las causas exactas de su muerte, su deceso ocurrió tras una vida dedicada a la ciencia y la educación.
Su trayectoria incluyó colaboraciones con el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) y múltiples publicaciones en revistas especializadas, dejando un legado que inspira a nuevas generaciones.
La comunidad científica y sus seres queridos preparan un homenaje póstumo para honrar su contribución, mientras Sonora despide a una de sus figuras más brillantes, cuya visión iluminó los secretos de la vida misma.