Empezó a escalar el caso de la joven mujer atropellada junto a su pequeña hija de 5 años y su sobrino de dos.
Los niños permanecen hospitalizados y muy delicados de salud, ella ha sido ya dada de alta y se recupera en su casa.
En el transcurso de este viernes familiares y amigos de las familias desarrollan protestas exigiendo a la familia del joven responsable del atropellamiento que lo entreguen.
Fueron hoy temprano a palacio de gobierno y por la tarde anunciaron dos protestas más a las salidas norte y sur de Hermosillo.
Los detalles que se saben son suficientes para causar la molestia no sólo de los allegados a estas familias, sino de una sociedad que se ha sumado de forma espontánea a las condenas por el modo en que han ido sucediendo las cosas.
Primero el atropellamiento y la fuga del culpable.
Después empieza a filtrarse información sobre la identidad del joven así como la de sus padres, sobre todo la mamá que resulta ser funcionaria, es defensora pública.
Las autoridades no tienen más remedio que revelar información confirmando lo que durante días se estuvo especulando en redes sociales y eso causa aún más indignación.
Se les está haciendo bolas el engrudo una vez más con este caso, la Fiscalía General de Justicia se apresura anoche a publicar un comunicado informando de las gestiones hechas a través del consulado de los Estados Unidos en Hermosillo para que el joven prófugo de la justicia sea capturado.
Queda la impresión de que es la sociedad la que le va pisando los talones a las autoridades, que se apuran pero no logran contener el malestar de la gente.
No se trata de lo numerosas o no que seas las manifestaciones de hoy, sino de la percepción con la que muchas personas se están quedando tras saberse detalles como el que el muchacho es hijo de una defensora pública y que fue finalmente una presión vía redes sociales la que obliga a dar más información.
Son de esas ocasiones que aunque las autoridades estén trabajando a marchas forzadas para resolverlo la gente nomás no la compra…y es que la desconfianza viene de años atrás, no es nueva.
Y es que si bien es cierto hay una investigación en curso y la familia del joven se apega a las garantías que la ley les ofrece, el hecho es que la imagen de las autoridades y su credibilidad está registrando un gran daño.
Es que lo único que se pide es lo único que no se les ha dado: JUSTICIA.
La Tijera es un texto confeccionado con recortes que aporta el staff de colaboradores de sergiovalle.mx
Cuidado con aquel que ande descosido.