A punto de cumplirse un año de la partida de Matthew Perry, su caso ha dado un nuevo giro.
La tarde del miércoles, el doctor Mark Chavez, uno de los médicos implicados en la muerte del actor, se declaró culpable de conspirar para distribuir ketamina, sustancia que le arrebató la vida al artista.
De acuerdo con información publicada por TMZ, Chavez compareció ante un juez federal este miércoles en Los Ángeles y aceptó su responsabilidad por la muerte del actor de “Friends”.
El abogado de Chavez, Matthew Binninger, declaró que su cliente ya ha iniciado el proceso para entregar su licencia médica, lo cual fue parte de un acuerdo con el gobierno: “La base fáctica del acuerdo de culpabilidad se utilizará como base para que la junta médica presente una denuncia en su contra, solicitando la entrega de su licencia. Estaremos de acuerdo con esa conclusión y, en ese momento, se le revocará la licencia”, dijo al medio.
Chavez, de 54 años, fue acusado junto a otras tres personas, incluyendo a Salvador Plasencia y a una traficante de drogas conocida como “la reina de la ketamina”, de facilitar la sustancia que terminó por arrebatarle la vida a Perry. Según las autoridades, el doctor obtuvo la ketamina de manera fraudulenta mediante recetas falsificadas y la distribuía a través de Plasencia.
Por ahora, permanece libre tras pagar una fianza de 50 mil dólares; sin embargo, podría enfrentar una sentencia de hasta 10 años, pero ésta no le será dictada sino hasta el próximo mes de abril.
Este caso también involucró a otros implicados, como el asistente personal de Perry, Kenneth Iwamasa, quien también aceptó un acuerdo de culpabilidad. Mientras tanto, otros coacusados, como Plasencia y Jasveen Sangha, se declararon inocentes y continúan enfrentando cargos relacionados con la distribución de drogas.