Una coalición conformada por veintiún fiscales generales de Estados Unidos presentó este 4 de abril una demanda contra la administración Trump por “desmantelar” agencias federales, recortando fondos parcialmente destinados a financiar bibliotecas y museos públicos en todo el país.
Esto, después de que, en marzo, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para cerrar tres agencias federales creadas anteriormente por el Congreso y que, según la coalición de fiscales, destinan “cientos de millones de dólares” en distintos programas.
A través de un comunicado, la fiscal general de Nueva York, Letitia James, declaró: “Las agencias que intentan desmantelar proporcionan fondos para ayudar a empresas propiedad de miembros de alguna minoría y también garantizan que nuestras bibliotecas y museos públicos permanezcan abiertos para que los niños tengan un aprendizaje permanente”.
Entre las dependencias que Trump planea desmantelar, con ayuda del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), liderado por Elon Musk, está el Instituto de Servicios de Museos y Bibliotecas (IMLS), que apoya a este tipo de centros mediante subvenciones y ayudas para proyectos de investigación.
Este grupo de fiscales argumenta que la orden ejecutiva del mandatario viola la Constitución y la Ley de Procedimiento Administrativo, ya que elimina los programas de las agencias sin tener en cuenta las normativas y regulaciones que controlan cada fuente de financiamiento federal.
