Por: Adrián Barrios y Denisse Robles
El proyecto de cancelar la presa Abelardo L Rodríguez y vender sus terrenos, así como construir otras tres presas aguas arriba que suplan la función de esta, debe ser primero aprobado por la Comisión Nacional del Agua, señaló el gobernador de Sonora Alfonso Durazo Montaño, quien dijo que este mismo martes iniciaría sus trabajos un grupo técnico que estudiará la viabilidad del proyecto.
El mandatario anteriormente señaló la posibilidad de cancelar esta presa ya que no se utilizaba agua de la misma, además planteó la construcción de otras 3 presas para el suministro del vital líquido en Hermosillo.
Aun cuando la semana pasada el mandatario estatal adelantó que se trabaja en un plan hídrico que incluye la cancelación del vaso de la presa Abelardo L. Rodríguez en Hermosillo, la urbanización de este predio para financiar con ello tres presas más que se construirían aguas arriba, este martes informó que cancelar este cuerpo de agua es el último paso del proyecto y solo sucederá si lo avala la Conagua.
“Hoy se establece un grupo técnico que va a realizar el estudio sobre la viabilidad del proyecto. No hay absolutamente ningún paso en este proyecto en tanto Conagua no apruebe la viabilidad técnica del proyecto”, dijo y agregó “es un estudio impresionantemente riguroso, para evitar que la cancelación de cualquier vaso de agua pueda presentar un riesgo para la población”.
El mandatario estatal, explicó que el estudio técnico tendrá una duración de varios meses e incluirá el Plan Hídrico que se está elaborando y que presentarán en el mes de noviembre y si este paquete de acciones se aprueba, después vendría la etapa de elaboración de los proyectos.
“Este año, según datos de Conagua, solo se utilizaron 6 millones de metros cúbicos (de la presa Abelardo L. Rodríguez), es decir, nada, pero la capital tiene una concesión de agua de 160 millones de metros cúbicos anuales, sin embargo, no hay presas suficientes de acopio para retener el agua y destinarla al consumo de la capital”, expresó.
De concretarse el proyecto, el terreno de la presa sería un patrimonio y reserva territorial de la entidad, y se destinaría una parte a la venta para el pago del financiamiento de las tres presas aguas arriba y sus respectivos acueductos