Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas) confiscaron un lanzacohetes y dos granadas propulsadas por cohetes escondidos en un automóvil que se dirigía a México.
Michel W. Humphries, director del Puerto de Nogales, informó que el alijo probablemente tenía como objetivo proteger a los cárteles y sus laboratorios de producción de fentanilo en México.
“¡Gran intercepción!”, celebró el director de la CBP del Puerto de Nogales.