El tema de la separación entre la cantante colombiana Shakira y el futbolista español Gerard Piqué por motivo de infidelidad no es secreto para nadie; la civilidad de este desencuentro amoroso está analizándose y poco a poco iremos enterándonos de más detalles. De momento esto es lo que se tiene.
La prensa del corazón se ha dado a la tarea de investigar y difundir las condiciones estrictas que la cantante ha puesto a su ahora expareja sobre la separación, la salud emocional y mental de los hijos que tienen en común y de cómo mostrar al mundo que están pero no están juntos.
La expareja discute cómo manejarán el tema para ir desapareciendo poco a poco de los titulares y al parecer es ella quien marca la pauta.
Los reportes más recientes señalan que se reunirán en la casa compartida como familia en Barcelona, España, donde acordarán la forma menos escandalosa de sobrellevar la infidelidad de Piqué con una azafata de 22 años que trabaja en las empresas del futbolista.
Entre las cláusulas que se estipularon en la reunión de la pareja, destaca que ni ella ni Gerard Piqué deberían mostrarse en público o en redes sociales con otras personas (sea hombre o mujer) hasta que pase una cantidad de tiempo considerable.
Otra condicionante es que ninguno de los dos podrá compartir en sus redes sociales fotografías indecentes o subidas de tono. De hecho, se estipuló que lo ideal era publicar únicamente imágenes familiares, es decir, como padres respetuosos, que tampoco podrán atacarse ni hablar mal del otro ante la prensa, por sus reputaciones y por los hijos en común Sasha y Milan.
Además, ha trascendido que Shakira inició los trámites migratorios para que sus hijos puedan mudarse y elegir escuelas donde continuar con sus vidas cotidianas una vez lejos de Gerard Piqué.
La duda es si regresarán a Colombia o se instalan en una mansión de Miami, en Estados Unidos, donde Shakira compró esta propiedad cuando era novia del argentino Antonio de la Rúa.
Fuente heraldo.com.mx
