La Organización Mundial de la Salud informó que casi 99% de la población global respira aire contaminado debido a la gran cantidad de uso de combustibles fósiles.
La doctora Sophie Gumy, del Departamento Medioambiental, Cambio Climático y Salud de la OMS, explicó que dio a conocer que llegaron a esta conclusión por los datos recolectados en miles de ciudades en todo el mundo.
En su informe, la OMS, destaca que más de 6 mil zonas urbanas en 117 países vigilan ahora la calidad del aire, aunque lo cierto es que las personas respiran niveles peligrosos de partículas muy finas de dióxido de nitrógeno.
Estas ciudades tan expuestas a la contaminación del aire corresponden a países de ingresos bajos o medio.
La funcionaria de la OMS, Maria Neira, condenó que, tras haber sobrevivido a la pandemia, 7 millones de muertes podrían evitarse, así como la pérdida de la salud por la contaminación del aire.
Las medidas para procurar un ambiente sano fueron tomadas entre 2010 y 2019, según el reporte de la OMS, y están relacionadas al impacto en los transportes de varios sectores económicos e industriales que contaminan. Pero esto fue antes de la pandemia de Covid-19.
Después del virus esparcido por el mundo, lo que debe hacerse es reducir el uso de combustibles fósiles y adoptar otras medidas específicas para reducir los niveles de contaminación en el aire.
Por su parte, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló que hay sistemas energéticos más limpios y sanos que deberían implementarse, a esto urge la preocupación en materia energética.
“Los elevados precios de los combustibles fósiles, la seguridad energética y la urgencia de hacer frente al doble reto sanitario de la contaminación del aire y del cambio climático subrayan la necesidad urgente de progresar más rápidamente hacia un mundo mucho menos dependiente de los combustibles fósiles”, agregó.
El dióxido de nitrógeno, que contamina el aire, se asocia a enfermedades respiratorias, en especial el asma, y genera síntomas respiratorios (como tos y dificultades para respirar) que pueden conducir a hospitalizaciones o a acudir a urgencias.
Las partículas son capaces de penetrar profundamente en los pulmones y en la circulación sanguínea, provocando problemas cardiovasculares, cerebrovasculares y respiratorios.
Fuente jornada.com.mx