La Evaluación Anual de Amenazas 2025 de la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos, publicada por la directora nacional de Inteligencia, Tulsi Gabbard, advierte sobre un notable incremento de productores independientes de fentanilo en México desde 2020.
Según el documento, “desde al menos 2020, el crecimiento de los productores independientes de fentanilo con sede en México —actores que son autónomos o semiautónomos del control de los cárteles mexicanos— ha fragmentado cada vez más el comercio”.
Estos productores, atraídos por la alta rentabilidad y la facilidad de sintetizar la droga con equipos básicos y pocos recursos humanos, han diversificado el mercado ilícito, señala el reporte: “los productores independientes de fentanilo se sienten atraídos por la rentabilidad de la droga y las bajas barreras de entrada al mercado, incluyendo la facilidad de sintetizarla utilizando equipo básico de laboratorio y poco personal”.
El informe también alerta sobre amenazas más amplias, indicando que “es probable que las Organizaciones Terroristas Extranjeras—incluido el Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), Al Qaeda, otros grupos terroristas islamistas y algunos cárteles de la droga—, hasta terroristas que actúan solos o en pequeñas células, persigan, faciliten o inspiren atentados”.
Además, subraya que “la inmigración ilegal a gran escala ha sobrecargado la infraestructura y los recursos locales y nacionales, y ha permitido que terroristas conocidos o presuntos crucen a Estados Unidos”, lo que agrava la situación de seguridad.
En el ámbito del narcotráfico, el reporte identifica a los cárteles mexicanos como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación como los principales proveedores de drogas ilícitas hacia Estados Unidos, incluyendo fentanilo, que sigue siendo la sustancia más letal con más de 52 mil muertes en un periodo de 12 meses hasta octubre de 2024, aunque esto refleja una reducción del 33% respecto al año anterior, posiblemente por el acceso a la naloxona.
El documento detalla que “el año pasado, los puntos de entrada oficiales a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México fueron el principal punto de entrada de drogas ilícitas, a menudo ocultas en vehículos de pasajeros y tractocamiones”, aunque los cárteles podrían estar ajustando sus métodos ante el reforzamiento de la seguridad fronteriza.
El senador republicano Tom Cotton, presidente del Comité, destacó durante una audiencia que “por primera vez, la Evaluación Anual de Amenazas señala a los actores extranjeros del narcotráfico como la principal amenaza para nuestro país.
Como destaca el informe, los cárteles con sede en México que utilizan precursores producidos en China continúan contrabandeando fentanilo y opioides sintéticos a Estados Unidos”.
Cotton expresó preocupación por la preparación de las agencias de inteligencia ante estas amenazas, afirmando: “sólo el año pasado, estas drogas mortales causaron la trágica muerte de más de 52 mil estadounidenses, una cifra superior a la de las víctimas de ataques terroristas o de naciones extranjeras.
Ante estas amenazas, debemos preguntarnos: ¿están nuestras agencias de inteligencia bien preparadas para enfrentarlas? Me temo que la respuesta es no, al menos no todavía”.
A nivel global, el informe apunta a una creciente cooperación entre China, Rusia, Irán y Corea del Norte, que “desafían los intereses de Estados Unidos en el mundo al atacar o amenazar a otros países en sus regiones”, aumentando los riesgos para la seguridad estadounidense. Este panorama, combinado con el auge del fentanilo y la violencia de los cárteles, plantea un desafío multidimensional para Estados Unidos, según la evaluación.