Ángel del Villar, empresario de la música regional mexicana y dueño de la disquera Del Records, fue declarado culpable de realizar negocios con un promotor de conciertos vinculado al narcotráfico, lo que podría derivar en una condena de hasta 30 años de prisión, según informó Billboard.
El productor musical fue hallado culpable en una corte de Estados Unidos por violar la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeras del Narcotráfico, mejor conocida como Ley Kingpin, y permanece en libertad condicional tras pagar una fianza de 100 mil dólares.
Del Villar, que tiene una audiencia de sentencia el 15 de agosto, enfrenta una pena máxima de 30 años en una cárcel.
El Departamento de Justicia de EU logró el veredicto tras presentar en el juicio el testimonio del reconocido cantante de corridos Gerardo Ortiz, quien se declaró culpable de un cargo de conspiración para realizar transacciones con un narcotraficante especialmente designado.
Del Villar fue arrestado en junio de 2022 junto con Luca Scalisi, director financiero de Del Entertainment. La Fiscalía estadounidense presentó pruebas de que el empresario organizó conciertos con Jesús Pérez Alvear, un promotor señalado por lavar dinero para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El jurado lo declaró culpable de 10 cargos por violar la Ley Kingpin, que prohíbe a ciudadanos y empresas estadounidenses hacer negocios con narcotraficantes. Billboard detalló que en abril de 2018, un artista de Del Records participó en un evento organizado por Pérez, a pesar de que el FBI ya lo tenía identificado como colaborador del crimen organizado.
El cantante Gerardo Ortiz, quien fue la primera gran estrella de Del Records, también se declaró culpable de conspiración para violar la Ley Kingpin. Según la Fiscalía, Ortiz reconoció que continuó trabajando con Pérez Alvear tras ser advertido por agentes federales en 2018. A pesar de conocer las sanciones, realizó 19 conciertos para el promotor vinculado al CJNG.
El fiscal Alexander Schwab reveló que Ortiz testificó en contra de Del Villar, confirmando que este lo persuadió de seguir con las presentaciones.
El impacto del veredicto
Tras el fallo, la familia y el equipo de Del Villar se reunieron fuera de la sala del tribunal. Según Univision, algunos rompieron en llanto. “Si yo no me miro agüitado, no se agüiten”, le dijo a su hijo. “Esperé cinco años para esto, yo estoy tranquilo”, agregó en un intento por calmar a sus allegados.
La sentencia aún no se ha dictado, pero la ley contempla penas severas para quienes violen sus disposiciones.
El caso de Ángel del Villar ha sacudido la industria musical y podría marcar un precedente en la relación entre el entretenimiento y las investigaciones por lavado de dinero en EE.UU.