José “Pepe” Mujica, el expresidente uruguayo de 89 años, reveló este jueves que el cáncer de esófago que sufre se le extendió al hígado, por lo que pidió que lo dejen “morir tranquilo”.
El ícono de la izquierda latinoamericana informó que ya no se puede detener el avance de la enfermedad, y dio a conocer su intención de despedirse tras saber que ha perdido la batalla contra el cáncer.
Señaló que su ciclo ha terminado, debido a que la enfermedad terminal se expandió del esófago al hígado.
“Me estoy muriendo y el guerrero tiene derecho a su descanso”. Con esta frase en la que sería su última entrevista a los medios de comunicación, el expresidente subrayó la situación de salud por la que atraviesa, motivo por el que aseguró que se alejará del foco público para “morir en paz”.
“José Mujica”:
— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) January 9, 2025
Porque anunció que el cáncer que padece se ha expandido al hígado y no hará más tratamientos. pic.twitter.com/biI0L2ISaq
En declaraciones al diario local “La Búsqueda”, Mujica sostuvo que no desea seguir con el tratamiento para combatir el cáncer, debido a su avanzada edad. Destacó que tiene dos enfermedades crónicas y su cuerpo “ya no aguanta más”.
“No lo paro con nada (…) Ya colonizó el hígado”, afirmó, en referencia al cáncer.
“Me quiero despedir de mis compañeros y de mis compatriotas, lo que pido es que me dejen tranquilo, que no me acosen con entrevistas al pedo y nada más. Se terminó mi ciclo hace rato. Sinceramente, me estoy muriendo”, reiteró en un tono resignado.
Con un discurso de aceptación de esta “nueva fase” en la que entra, Mujica también comentó que está dejando “todo preparado” para ser enterrado en el pequeño terreno en que ha vivido durante décadas, incluso cuando fue presidente de Uruguay entre 2010 y 2015.
El hombre que lideró un destacado gobierno progresista de Uruguay, con medidas pioneras entre varios países de Latinoamérica, como la legalización de la marihuana para uso recreativo, el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo, señaló que espera el momento de descansar. “Siempre me ha gustado la tierra”, resaltó y explicó que también está “acomodando las cosas para los que van a quedar” a vivir ahí.