El ex vicepresidente de Ecuador Jorge Glas fue trasladado a un hospital en Guayaquil el lunes, dijo la agencia penitenciaria SNAI en un comunicado, debido a que aparentemente se enfermó después de negarse a recibir comida en la prisión.
Glas, condenado dos veces por corrupción y que ahora enfrenta nuevos cargos, fue arrestado la noche del viernes cuando la policía ecuatoriana irrumpió en la embajada de México en Quito, donde se había refugiado desde diciembre, y trasladado a una cárcel en Guayaquil.
“Se determinó que la persona privada de la libertad Jorge G. sufrió una posible descompensación por su negativa a consumir los alimentos provistos por este Servicio de Estado, durante las últimas 24 horas”, dijo SNAI en un comunicado.
“El estado de salud de la persona privada de libertad Jorge G. es estable, y permanecerá en observación durante las próximas horas”, agregó.
La inusual incursión provocó una disputa entre los dos países al punto de ebullición, lo que llevó a México a suspender relaciones diplomáticas con Ecuador y generó críticas de países de la región y del mundo.
Ecuador ha defendido el ingreso a la embajada, argumentando que México no podía otorgar asilo diplomático a Glas porque enfrenta cargos y que Ecuador tenía información sobre un inminente plan de fuga.
En una carta abierta a los administradores del penal La Roca de Guayaquil, fechada el domingo, Sonia Vera, abogada de Glas, había expresado su “preocupación y alarma” por “la total imposibilidad de establecer comunicación con nuestro defendido durante más de 48 horas”, afirmando que era “una infracción severa” a los derechos fundamentales del exfuncionario.