Tambores, tenabaris y cascabeles hechos de pezuñas de animales ambientaron de sonidos ceremoniales el Sábado de Gloria en la Ramada Yaqui Revolución, una de las 8 sedes que este año se instalaron en la ciudad para honrar las tradiciones de Cuaresma de la etnia.
La dinámica del día inició temprano con el riego con pipa de la explanada donde más tarde se celebrarían los rezos por la muerte de Cristo y el canto de gloria, así como la quema de máscaras y del malhumor, los actos más esperados por los visitantes.
Los propios fariseos o chapayecas, junto con quienes conforman la milicia durante la Cuaresma Yaqui, se ocuparon del barrido manual del terreno, del que retiraron desechos diversos de bebidas y snacks del día anterior. De la disposición final de esos desperdicios se ocupó el personal de Servicios Públicos Municipales.
Visitantes de todas edades, así como vendedoras y vendedores ambulantes, unos sentados y otros de pie, atestiguaron durante la mañana del sábado los recorridos previos al momento en que los fariseos se despojaron de las vistosas máscaras que portaron en los rituales del 2024.
La quema de estos objetos y del malhumor simboliza el ánimo de destruir la maldad humana que rodeó el sacrificio de Cristo, explicaron miembros de la etnia.
El atestiguar estas expresiones de herencia cultural es para las miles de personas que acuden a las diferentes ramadas algo por lo que vale la pena volver en la Cuaresma de cada año.
