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Paquete Económico 2024, de mal en peor

por German Lohr Granich

Se entregó en tiempo y forma el paquete económico para el 2024 integrado por La Ley de Ingresos de la Federación, el Presupuesto de Egresos y los Criterios de Política Económica.

En sus consideraciones destaca en principio la ya famosa austeridad republicana, el manejo prudente de las variables macroeconómicas y la deuda pública.

 De aquí a su discusión y aprobación dará mucho de qué hablar, sobre todo en año electoral será tema recurrente y hay que aprovecharlo para conocer hacia dónde vamos o nos llevan.

La Secretaria de Hacienda y Crédito Público por supuesto que se cura en salud, rubro, por cierto, que le va bastante mal si nos atenemos a los parámetros internacionales que se manejan en la OCDE y al mega desastre postpandemico.

Decía que se curan en salud al reconocer los de casa, la necesidad de una reforma hacendaria urgente, pero para el sexenio que viene dada las presiones en la carga presupuestaria orquestada por ya saben quién-YSQ-.

 Son presiones gestadas en programas como las pensiones para adultos mayores, becas, ninis, sembrando vida y por supuesto las obras emblemáticas como AIFA, el tren maya, dos bocas y el corredor tras- ístmico.

Respecto al marco macroeconómico se maneja un crecimiento que oscila entre el 2,5 y 3% del PIB cuando organismos como la CEPAL entre otros, estiman tasas menores al 2%.

Adicionalmente contempla inflación del 4.5%, el peso en 17.1 por dólar, una tasa de interés del 10.3%, un barril de petróleo de 56.7 dólares y un nivel de deuda pública del 48.8% del PIB datos muy debatibles.

Los de MORENA como siempre no desean moverle ni una coma al paquetazo con el argumento de que no hay nuevos impuestos, pero si nuevos derechos para ejército y marina no se diga la orientación electorera del gasto público.

El monto a ejercer el 2024 contempla más de 9 billones,066 mil millones de pesos financiado con casi 2 billones de endeudamiento dentro de un supuesto entorno económico estable pero incierto, sin recesión a la vista, bañista.

Brillan por el poco margen de apoyo y ausencia presupuestal, la innovación, salud, educación, medio ambiente, tecnología e inteligencia artificial tan presente como el internet y la electricidad.

Estos programas y proyectos que se esperen, ah, pero la manga ancha, el aprovéchate Matías, el oro y el moro que sean para la marina, el ejército, los ninis y lo faraónico de las obras de la 4T, sube el cero y no toca.

Es definitivo si aspiramos a crecer a tasas mayores al 4% y continuar aprovechando lo poco que nos queda del bono demográfico necesitamos transitar por otros senderos y pensar productivamente.

Me refiero que hay que gastar mejor en la educación, salud, energías limpias, nearshoring, cambio climático, idiomas, tecnología e inteligencia artificial ya que en esta (IA) nuestros niveles de conocimiento están entre los más bajos del mundo.

Entiendo que un globo no hace la fiesta, pero plantear un déficit cercano al 5% con el equivalente histórico del gasto del 26.2% del PIB, no es poca cosa cuando las tasas de interés siguen altas cosa no vista ni en la pandemia, pero si en el último año del sexenio.

Ojalá más pronto que después, revisemos y opinemos sobre estos menesteres y subir a la agenda nacional lo relevante ya que el horno no está para bollos ni la novia para tafetanes dirían nuestras abuelas.

HE DIXI

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