El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se entregó voluntariamente a las autoridades de Nueva York, donde fue arrestado y acusado de 34 delitos graves.
Con esto se convierte en el primer exmandatario de la historia de Estados Unidos que enfrenta un proceso criminal. Ahora tiene es el protagonista del caso # 71543-23.
Trump llegó a las oficinas del fiscal distrital de Manhattan, Alvin Bragg, donde fue formalmente arrestado y fichado –con todo y huellas dactilares, aunque evitó ser fotografiado o esposado-
De ahí procedió al edificio de tribunales criminales de Nueva York que está al lado y donde compareció ante el juez Juan Merchan, quien leyó los cargos al ahora acusado bajo arresto y, al ser preguntado si aceptaba o no su culpabilidad, el ex presidente habló por primera vez al responder “no culpable”.
Merchan advirtió al expresidente y a los abogados que “por favor evitaran hacer declaraciones que probablemente inciten a violencia o disturbios civiles” o “comportamiento que hace peligrar el imperio de la ley”. En los últimos días, el fiscal y el juez han recibido unas 50 amenazas de simpatizantes de Trump consideradas “serias” por la policía.
Mientras esto sucedía, alrededor del tribunal se formó un grupo que comenzó desde temprano a manifestarse a favor de Trump, quienes, a su vez, se enfrentaron a manifestantes anti-trumpistas
Todo el proceso ante el juez duró aproximadamente una hora, se estableció un calendario preliminar para proceder hacia un juicio, el cual, si es que se realiza, no sería hasta el próximo año. Al concluir la sesión Trump salió por una puerta de atrás del tribunal para proceder hacia el aeropuerto y su vuelo privado de regreso a su mansión en Palm Beach, Florida.
Los 34 cargos son todos delitos graves por falsificación de documentos de negocio para ocultar y emplear de manera ilícita diversos pagos. En la declaración oficial de hechos en apoyo de la acusación, los fiscales afirman que Trump “repetidamente y de manera fraudulenta falsificó documentos empresariales en Nueva York para ocultar conducta criminal que ocultó información dañina del público votante durante la elección de 2016”.
El fiscal distrital Bragg enfatizó que los cargos no son por los pagos a estas personas, sino la falsificación de los documentos empresariales sobre esos pagos. “Bajo la ley estatal de Nueva York, es un delito grave falsificar documentos empresariales con la intención de encubrir otro delito”, afirmó en conferencia de prensa después del arresto y comparecencia de Trump ante un juez. Reitero: esos son “delitos graves en el estado de Nueva York, sin importar quién eres”, subrayando la consigna de que “todos son iguales ante la ley, sin importar el dinero, sin importar el poder”.
La noche del martes después de regresar a su mansión y club Mar-a-Lago en Florida, Trump declaró que no hay nada en los cargos que se le imputan. “El criminal real es el fiscal distrital, debería de ser enjuiciado”. Agregó “tengo a un juez que odia a Trump, con una esposa que odia a Trump, cuya hija trabajó para [la vicepresidenta] Kamala Harris”. También denunció los otros casos legales pendientes en su contra en Georgia, el estado de Nueva York y los que proceden a nivel federal.
Fuente jornada.com.mx