Luego de que un grupo de niños del poblado Miguel Alemán respondieran que, de grandes, quieren ser sicarios, el candidato a la alcaldía de Hermosillo por Movimiento Ciudadano señaló la urgencia de trabajar como gobierno y como sociedad con la niñez.
David Figueroa Ortega expuso que no es posible que los niños y jóvenes no tengan esperanza y entreguen así su futuro, viendo como ejemplo al crimen organizado; “es una realidad que latina y lacera el corazón de cualquier sociedad”, dijo.
El candidato dijo que no puede haber proyecto, estrategia ni desarrollo si no se pone atención a la niñez, como lo más valioso que tenemos; agregó que los adultos no pueden taparse los ojos y oídos y entender que algo está mal.
Con acciones contundentes de prevención tenemos que salir a las calles, a las plazas, a los parques, dijo, a través de los padres de familia, de los maestros, de cualquier puente y posibilidad a nuestro alcance para rescatarlos de esas malas ideas, de esas puertas falsas ante la falta de atención, de esperanza, de desarrollo en medio de tanta pobreza y marginación en lugares como el poblado Miguel Alemán.
Foto: Movimiento Ciudadano
David Figueroa indicó que hay que entender que los gobiernos están fallando, están ausentes, lejos de la realidad de las familias; por eso ofrece un gobierno sensible que contribuya a cambiar el destino de los niños, de las mamás que se sienten solas y desprotegidas, de las mujeres que son cabeza de familia y tampoco hay quien las atienda y entienda.
El candidato de Movimiento Ciudadano recordó que le falta de guarderías por decisión del gobierno de morena ha agravado el peligro y el riesgo de perder a la niñez en nuestro país, pues sus madres se encuentran entre la disyuntiva de quedarse a cuidarlos o salir a trabajar para alimentarlos y dejarlos prácticamente en la calle ‘a la buena de Dios’.
Estas son situaciones que deben atenderse si se quieren calles más seguras o un Hermosillo en paz; hay que pensar en que los niños merecen conservar sus sueños.
David Figueroa cuestionó que estamos reaccionando en lugar de prevenir cuando un peso invertido en la prevención, vale mucho más que un peso gastado en corrección. Se necesitan muchos más recursos, recursos que no tenemos, para enmendar que para evitar lo que hoy tenemos y vivimos en nuestras calles, concretó.
